Se han ejecutado cuatro perforaciones profundas para detectar la superficie de falla y el regimen de aguas subterráneas. La superficie de falla se encuentra entre 20 y 30 metros bajo el nivel actual del terreno. Se ha realizado además el levantamiento topográfico del sector que cubre la grieta principal y el inventario de las viviendas afectadas, en forma grave, por los movimientos ocurridos hasta el momento. Se elaboró un plano geológico y se han hecho varios sondeos geoeléctricos para determinar el regimen de aguas subterránea. Se han construido los drenes profundos horizontales de prueba y actualmente se tiene proyectado un pozo de bombeo de agua subterránea. El avance de las investigaciones no es suficiente para producir diseños de las obras requeridas.